Concurso de relatos 46ª Ed. Momo de Michael Ende (La foto)


 En el concurso de relatos de este mes, desde El Tintero de Oro, Merche nos propone escribir una historia que derroche imaginación y que contenga un acertijo. Me ha costado bastante encontrar la inspiración y llego en la recta final del plazo, pero por aquí os dejo mi propuesta. Y aquí podéis leer la del resto de participantes.

La vieja casa del campo siempre me ha dado mucho respeto. De pequeña, a pesar de los kilómetros para correr y explorar, nunca me gustó pasar demasiado tiempo allí. Tenía la extraña sensación, por ridícula que fuera, de que alguien me observaba. Hoy, después de mucho tiempo, vuelvo a pisar ese lugar. Mis padres han fallecido y tengo que decidir qué hacer con la vivienda. Estar de nuevo frente al nogal que franquea la entrada es raro. Sin las bromas de mi padre y las risas de mi madre todo parece más apagado que de costumbre. Ya nadie riega el jardín de rosas, que se está marchitando sin remedio.

Me quedo un rato parada frente a la puerta, pensando, recordando. La sensación que me transmite el entorno sigue sin gustarme. Pero ya soy adulta y nadie va a ocuparse de este trámite por mí, así que no me queda otra que tragarme ese malestar y entrar a evaluar el estado del domicilio. Quizás consiga sacarle un buen pico si la vendo. Antes tendría que adecentarla, limpiando y tirando aquellas pertenencias que ya no sirven de nada. Con esa idea en mente me dirijo a la habitación que cumple la función de desván, la última del pasillo. Es el lugar donde más objetos inútiles acumulaban mis padres. Por si algún día servían, solían decir. Aunque eso jamás pasó.

Me pongo a rebuscar entre el montón de cachivaches a ver si puedo salvar algo, no sin antes abrir la ventana. La brisa que se cuela ayudará a descargar el ambiente. El cuarto lleva semanas cerrado y huele a humedad.  Arrodillada en el suelo de madera descubro una pequeña trampilla y saco el contenido de su interior. Unos álbumes viejos y llenos de polvo. Me sorprende que estén guardados en ese rincón, en vez de en el mueble del salón con el resto de las fotografías. Soplo sobre las solapas del primer álbum de fotos mientras pienso en la función del improvisado escondite. Por qué está ahí y cuando instalaron esa pequeña compuerta. Por qué ocultaron esas imágenes descoloridas si no cuentan con ninguna característica especial. Aun así, voy pasándolas, una a una, deteniéndome en los detalles.

Encuentro una que me llama la atención. Muestra a mis padres acaramelados en un día de verano. Mi madre lleva un sombrero para resguardarse del calor. Mi padre carga con una cantimplora colgada de la cintura. Ambos se muestran felices. Daría lo que fuera para poder retroceder en el tiempo justo hasta ese momento. Acompañada de sus sonrisas todo sería más sencillo. Esa opción, muy a mi pesar, ya no es posible. Nunca lo fue. El reloj avanza y nadie jamás podrá detenerlo. Es el destino que le espera a cualquier ser vivo. Una lágrima solitaria rueda por mi mejilla y me la seco con el dorso de la mano con rapidez. Paso a la siguiente imagen. Es un paisaje que muestra un perfecto círculo de hadas. A lo lejos se distingue el columpio del jardín trasero, por lo que imagino que ha sido tomada cerca de esta propiedad. Sin embargo, no recuerdo ninguna formación con esas características por los alrededores. Tal vez desapareció con el tiempo, pienso. Durante unos segundos me quedo abstraída. Esta toma brilla más que el resto y no tiene un aspecto tan deteriorado. Por algún motivo se ha conservado mucho mejor que las otras. Miro el reverso y descubro que hay algo escrito con caligrafía fina.

Fija la mirada y me podrás ver

Pero si me buscas, te podrías perder

Vivo en la imaginación de aquel que sabe atender,

Siempre sigilosa, me escondo tras este papel.

Vuelvo a centrar mi atención en ella, intentando retener los detalles, descubrir a qué se refiere el texto, y algo tira de mí. La cabeza me da vueltas, me siento mareada y creo que en algún momento pierdo el conocimiento.

Me despierto tumbada sobre el césped y me pregunto qué ha pasado, cómo he llegado aquí. Me incorporo y miro alrededor. Estoy dentro de un círculo de hadas. ¿Será el mismo de la foto? El aire tiene otro color y mis preocupaciones se han vuelto más ligeras, aunque me gustaría averiguar dónde estoy. Comienzo a caminar, saliendo de la circunferencia natural formada por los hongos. Encima de ellos veo diminutas figuras danzantes, que saltan de un lado a otro. Son del tamaño de una moneda, a lo sumo, y brillan como si fueran luciérnagas. Me acerco un poco para contemplarlas mejor y salen en desbandada, impulsadas por las traslúcidas alas.

También posee el don, oigo que susurra una voz melodiosa. Miro a mi alrededor. En esta ocasión no las veo. Deben estar ocultas entre los setos. Me pregunto a qué se refieren con esa frase. No sé lo que acaba de pasar. Parece que continúo en los exteriores de la casa familiar, con algunos pequeños matices. La existencia de las hadas, por ejemplo. ¿Las fotos que mis padres atesoraban en la trampilla fueron tomadas en esta realidad? ¿Y cómo llegaron ellos aquí? Es más, ¿cómo voy a salir yo si hasta hace unos minutos no sabía que tenía la capacidad de entrar a esta especie de mundo alternativo? Tal vez las hadas tengan la respuesta, me digo, dispuesta a averiguar la manera de entablar conversación con ellas.

Comentarios

  1. Hola, Rocío, pues está bien, muy idílico y de cuento de hadas, a más de una, yo incluida, nos gustaría tener ese don... Pero, como no lo tenemos, pues escribimos sobre ellas, así las imaginamos.
    Muchas gracias por tu participación y mucha suerte en el concurso.
    Un abrazo. :)

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    1. ¡Hola Merche! Muchas gracias por tus palabras. Ha sido complicado dar con una historia en esta ocasión pero algo ha salido.

      Un saludo.

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  2. Qué bonito, Rocío. Un relato que empieza con un halo desencantado frente a las pérdidas y el paso del tiempo y termina convertido en un cuento de hadas muy especial. Me ha gustado mucho también el acertijo y la suavidad que tiene el tono narrativo. Una historia preciosa.

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    1. Muchas gracias por tu comentario Marta. Me alegra mucho que te haya gustado, sobre todo el acertijo, que ha sido lo más complicado porque no sabía muy bien como enfocarlo e integrarlo en la historia.

      Un saludo.

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  3. Hola Rocío
    Un precioso relato que nos hace entrar en un mundo mágico y deseable. ¿Un lugar en cuyo jardín se reúnen las hadas? Si fuera la protagonista no vendería esa casa. Es más, me mudaría a ella. Un tesoro tan singular no se encuentra todos los días. Y ya me imagino las conversaciones con ellas, sentada en el columpio y charlando.
    Un abrazo de Marlen

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    1. ¡Hola Trujamán! Totalmente, esa casa es para no venderla. Quién sabe los secretos que podrían contarnos las hadas.

      Un saludo.

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  4. Me hizo recordar a las hadas de Cottingley, fotografías con supuestas apariciones, que Arthur Conan Doyle crreyó reales.
    Pero en este caso, lo eran. Y como dice algún comentario anterior, es para conservar esa casa.
    Besos.

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    1. ¡Hola Demiurgo! Pues mira estuve leyendo un libro que toma de base esa historia de las hadas de Cottingley a principios de año (me lo regalaron por navidad). El gran timo de las hadas se llama, de Felix J. Palma. A lo mejor algo de esa historia sigue resonando en mi y ha aflorado en este relato.

      Un saludo.

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  5. Es curioso pero todos los personajes de fantasia o usuarios de magia y hechiceria siempre reimiten a algun acertijo que incluso al resolverlo da problema,

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    1. ¡Hola Jose! Totalmente jajaja no hay que fiarse de los hechizos por muy buenos que sean, la magia siempre es volátil e incontrolable. Pero sin problema no tendríamos historia.

      Un saludo y gracias por leerme.

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  6. ¡Hola, Rocío!

    Qué bien medido está este relato. Me ha encantado ese equilibrio entre el misterio suave, la emoción contenida y ese paso casi imperceptible hacia lo fantástico. Has logrado que el lector entre a ese desván contigo y luego se despierte, mareado pero fascinado, en medio de un círculo de hadas que no necesita explicación para funcionar.

    El acertijo de la foto está perfectamente planteado: no como una adivinanza para resolver, sino como una invitación a mirar más allá, a detenerse, a dejarse tocar por algo que no se ve pero se intuye. Y justo eso es lo que hace tu relato: nos recuerda que hay cosas que solo aparecen cuando las miramos sin forzar, con los ojos de dentro.

    Además, me ha parecido muy bonito cómo has hecho que la pérdida y el recuerdo sean parte del camino hacia lo mágico, sin cargarlo de drama ni de golpes de efecto. La emoción está ahí, silenciosa, pero sosteniendo todo.

    Gracias por compartir este rincón de memoria y maravilla.
    ¡Un abrazo!

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  7. ¡Hola Miguel! Gracias a ti por leerme y desmenuzar los entresijos de esta historia de esta forma. Me alegra que hayas disfrutado de la historia, que te hayas detenido a mirar cada significado y, sobre todo, que destaques el acertijo porque es la parte que más dolores de cabeza me dio. Como he dicho más arriba no sabía muy bien como enfocarlo ni qué palabras utilizar. Y, al final, como bien señalas, no es un acertijo en si, sino una invitación a traspasar las fronteras y dejarse atrapar por ese mundo de magia que convive con el real.

    Un saludo.

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  8. ¡Hola, Rocío!
    Tu historia me ha mantenido en vilo de principio a fin. Toda la parte descriptiva es excelente porque te hace sentir esa mezcla de rechazo y melancolía ante el viejo caserón. Luego nos llevas al misterio del círculo a través de la foto, que también me parece muy buena por lo original de la idea y por supuesto, el acertijo, que encaja a la perfección.
    ¡¡Muy buen aporte!!
    Un abrazo :-)

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    1. Muchas gracias por tu comentario Maite. Me alegra que hayas disfrutado del relato,

      Un saludo.

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  9. Hola Rocío!
    Que relato más dulce y mágico nos has regalado! Con la situación tan real y familiar del punto de partida nos haces ir entrando sin darnos cuenta en esa dimensión mágica y especial de las hadas, y nos la haces descubrir por sorpresa como le pasa a la protagonista! Parece ser que ha recibido un don familiar muy especial, hay un legado mejor que puedan regalarte los tuyos? Un abrazote y mucha suerte en el concurso!

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    1. ¡Hola Marifelita! Pues si, ha recibido un don realmente especial.

      Gracias por pasarte y comentar tus impresiones sobre el relato.

      Un saludo.

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  10. Volver a mirar pero sin buscar: volver a empezar después de tanta pérdida, y encontrar allí mismo la recóndita maravilla. Precioso, Rocio, aéreo y suave como las hadas. Un abrazo

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  11. Me han ocurrido situaciones similares cuando esculco las pertenencias de mis padres o abuelos y encuentro esas fotos que efectivamente es tal cual dices, detrás en tinta siempre hay escrito algo que impacta, es decir la letra de la gente de hace unas décadas era tan bella, y siempre también me dejaban pasmada porque no entendía a que se referían, y si preguntaba a los mayores, todos guardaban silencio de que significaba. Hermoso relato.

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    1. ¡Hola Lucila! Tienes toda la razón. Esas fotos antiguas tienen un halo como de otro tiempo que te llevan a quedarte embobada mirándolas. De más pequeña, cuando hacía limpieza, siempre me gustaba quedarme un rato revisando fotos antiguas o pequeñas pertenencias del pasado que permanecen guardadas.

      Un saludo.

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  12. Hola Rocío. Has escrito una pieza llena de evocación, donde la nostalgia, el misterio y un toque de fantasía, construyen un relato redondo. También me resulta íntimo y emocional.
    Frases como "sin las bromas de mi padre y las risas de mi madre todo parece más apagado" o "el reloj avanza y nadie jamás podrá detenerlo" reflejan de forma clara el peso del duelo y el paso del tiempo. Además introduces un elemento de fantasía (el círculo de hadas y las criaturas diminutas) que contrasta con la melancolía inicial.
    Para mí, la casa del campo, con su atmósfera inquietante, simboliza el pasado y las emociones reprimidas, mientras que el círculo de hadas representa un portal a otra realidad, un escape o una oportunidad de reconectar con algo perdido.
    De cualquier manera, me ha encantado leerte.
    ¡Saludos!

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    1. ¡Hola Marcos! Muchas gracias por esa interpretación tan acertada del relato. Estoy muy contenta de que te haya gustado su lectura.

      Un saludo.

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  13. Hola, Rocío. Una relato cargado de sentimientos el que presentas en este reto. Y muy interesante el que comience como una historia que puede pasarle a cualquiera en la vida real para tornarse en algo mágico. A ver qué le cuentan las hadas a nuestra protagonista.
    Que tengas mucha suerte. Un saludo.

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    1. ¡Hola Bruno! Puede que le narren algún secreto importante, aunque el simple hecho de poder acceder a ese mundo en el que las hadas moran ya es un regalo importante.

      Un saludo y gracias por pasarte a leerme.

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  14. Irradia mágia este relato que parecía llevar camino de terror psicológico. Y las únicas apariciones, sin embargo son las de esos delicados seres diminutos de alas transparentes. Me ha parecido deliciosa la lectura con un ritmo adecuado y sin sorpresas desagradables.
    Un abrazo

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    1. ¡Hola Francisco! Pues también habría sido otra muy buena opción tirar por la parte del terror psicológico. Pero seguro que las hadas son más amables.

      Un saludo y gracias por leerme.

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  15. Hola, Rocío. Quédate ahí, con las hadas, que lo que hay en el otro mundo es pero. Ja, ja, ja, es broma. Ambas hemos escrito sobre hadas pero desde el lugar opuesto. Muy bonito e intrigante relato que podría tener una continuación.

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    1. ¡Hola de la Flor! Sí, pensé lo mismo a leerte. Hemos coincidido en las hadas, sólo que las tuyas se internan en el mundo humano y las mías se topan con la humana en su mundo.
      Ojalá poderme quedar en ese mundo de las hadas. Si es que existe.

      Un saludo y gracias por leerme.

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  16. Hola Rocío, que historia tan hermosa desde la tristeza a la magia de un mundo paralelo. Muy bien ambientado y contado me ha gustado mucho. Suerte. Un abrazo.

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    1. ¡Hola Ainhoa! Muchas gracias por tus palabras. Me alegra que te haya gustado la ambientación del relato.

      Un saludo.

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  17. Hola Rocío, es un relato muy bonito, todo un cuento de hadas entre dos mundos paralelos, el real y el mágico. Me ha encantado y atrapado hasta el final.
    Un abrazo!

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    1. ¡Hola Dakota! Que bien que el relato haya logrado atraparte de esa manera.

      Un saludo.

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  18. Hola, Rocío, un relato para saborear lentamente tratando de revivir cada detalle en la imaginación. Desde el inicio se siente el peso de esa responsabilidad y de esos recuerdos que la marcaron. El ambiente es revelador y el descubrimiento de ese escondite llena de intriga la escena, para luego entrar en acción el misterio al aparecer esa foto tan particular con esa inscripción detrás tan enigmática, que a manera de acertijo juega un papel muy importante dando paso a la magia, toda una experiencia mística que al escuchar "También posee el don", la deja más absorta e intrigada, sin saber cómo salir de ese estado de ensueño o dimensión a la que tampoco sabe cómo entró. Esperemos que las hadas puedan ayudarla a entender esa realidad.
    Hermoso y fantástico relato, con ese acertijo tan bien logrado, que junto a la fotografía viene a encender la llama de un pasado desconocido pero a la vez muy familiar.
    Un gusto leerte Rocio, un abrazo.

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    1. ¡Hola Harolina! Muchas gracias por pasarte a leerme y por el analisis tan detallado que haces del relato en tu comentario. Me alegra un montón que hayas disfrutado con su lectura.

      Un saludo.

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  19. ¡Hola, Rocío! Me ha encantado tu relato, con ese comienzo de la protagonista en la vieja casa de campo. Un lugar que podría ser una maravilla, pero que a ella, ahora sin sus padres le resulta más como una carga. Sin embargo, a medida que avanza la historia y, con el descubrimiento de esa misteriosa y fantástica fotografía, esa vieja casa se convierte en un lugar mágico donde la protagonista encuentra la esperanza de volver a ver a sus padres con la ayuda de las hadas. Estoy segura de que encontrará la forma de hablar con ellas. Te felicito. ¡Suerte en el concurso y un abrazo!

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    1. Muchas gracias por tu atenta lectura Cristina. Celebro que te haya gustado.

      Un saludo.

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